No olvides disfrutar de la terraza en la azotea para vistas impresionantes de la ciudad, especialmente al atardecer.

El hotel tiene un diseño muy moderno y acogedor.

La experiencia de check-in fue frustrante debido a la confusión con el sistema automático, que me llevó más tiempo del que esperaba. Además, el restaurante del hotel resultó ser decepcionante, con precios altos y una calidad de comida que no cumplió con mis expectativas. Por si fuera poco, la falta de ciertos elementos esenciales en la habitación, como una nevera pequeña y productos de aseo, hizo que mi estancia fuera menos cómoda de lo que esperaba.

maravillosa proximidad a monumentos y zonas verdes

mi estancia fue encantadora, con la grandiosa basílica de san miguel a solo 15 minutos a pie y el hermoso monumento a los girondinos a menos de 20 minutos a pie, lo que me permitió disfrutar de largos paseos por la ciudad mientras descubría sus joyas arquitectónicas.

Recomendado para quienes buscan comodidad y diseño

Este hotel tiene una ubicación genial, muy cerca de la línea de tranvía y hay comida rápida como McDonald's y KFC a pasos. me impresionó que la habitación tuviera acceso a una cocina compartida en cada piso, donde pudimos rellenar agua y disfrutar de bebidas sin costo en el refrigerador.

No fue barato, pero aún así estaba aceptable.

Qué maravilla el un milhojas de pulpo en La Table de Burdigala, sublime! Además, cada mañana arranqué mi día con un café con leche de avena que Mathilde me preparaba, ¡un lujo! El hotel es reciente y está decorado con mucho estilo, con habitaciones amplias y cómodas donde realmente se puede descansar después de explorar la ciudad.

Aunque la carta del restaurante podría incluir cenas y no solo tapas, a veces uno después de un largo día prefiere cenar en el hotel. La maestra de la limpieza nunca pasó la aspiradora, pero a pesar de eso, todo relucía.

El desayuno estaba delicioso y abundante.

Habitaciones amplias con vista panorámica.

Merece la pena? Mi respuesta

La ubicación es increíble, permitiéndome disfrutar del centro histórico. Sin embargo, experimenté algunos problemas, como una confusión en el check-in y el ruido de fiestas de otros huéspedes durante la noche. La calidad del desayuno también fue inconsistente. A pesar de esto, el personal fue amable y trató de ayudar en lo posible.

la habitación era increíblemente espaciosa y cómoda! ! el personal fue excepcionalmente amable, ¡siempre dispuesto a ayudar! la ubicación es genial, a solo un paseo de los principales monumentos y plazas. el servicio de limpieza y desayunos a la habitación fueron un gran plus.

más rótulos en la entrada ayudarían 🚶.

Una experiencia increíble en Burdeos!

Tuvimos una estancia maravillosa de dos noches. El personal fue extremadamente atento, y el pastel de cumpleaños fue el mejor detalle. Disfrutamos de cenas exquisitas en el restaurante y el desayuno fue delicioso. No olviden pedir el café con leche de avena por la mañana, ¡es un lujo!

Las habitaciones son amplias y luminosas, y cada mañana disfruté de un delicioso café con leche de avena que me sorprendió. Me encantó relajarme en la terraza soleada y había un rincón con sillas cómodas para leer. Sin embargo, la entrada al hotel tenía un acceso un poco complicado que podría mejorarse. ¡Recomiendo probar el café!

El hotel tiene un diseño muy moderno y acogedor. La cama era increíblemente cómoda y el gel de baño de gran calidad. El desayuno, que se sirve a la mesa, era abundante y delicioso sin desperdiciar comida. Además, la ubicación es perfecta para explorar el centro histórico.

El sistema de check-in automático puede resultar confuso.

La habitación era cómoda y disfruté de una vista de la ciudad agradable. Sin embargo, me sorprendió que la entrada al hotel requería subir escaleras y el check-in con máquina automática puede resultar un poco complicado. fue desacertado que no pudieran ofrecerme algo para beber a una hora razonable, teniendo que salir a buscar algo fuera.

La habitación King con vista al parque ofrece un ambiente agradable y relajante. El espacio es amplio y cómodo, ideal para descansar después de un día explorando la ciudad.

El restaurante Bada tiene precios elevados y la calidad de la comida deja mucho que desear. las croquetas anunciadas como de jamón resultaron ser casi incomestibles. Además, la falta de ciertos elementos esenciales en la habitación como shampoo y una pequeña refrigeradora puede ser una incomodidad para quienes esperan un servicio más completo. Aún más, el olor a gato en el lavabo puede ser un problema para quienes no son aficionados a las mascotas.

Habitación cómoda y moderna, con buen control de temperatura y café de prensa francesa. La señalización confusa en la entrada complicó el check-in, además la falta de comunicación hizo que no encontrara la cocina compartida hasta el último momento.